Encuéntranos en Google+.

19 de abril de 2013

TOMATE FRITO CASERO. TOMATE Y NADA MÁS.

Hoy preparamos esta salsa de tomate frito casero, sin más pretensión que la de mostrar lo fácil que resulta preparar una de las salsas más conocidas en todo el mundo. Ni que decir tiene que ha servido y sigue sirviendo como condimento indispensable para multitud de recetas de cualquier gastronomía.

Hoy me voy a centrar en una salsa de tomate básica elaborada como antaño, y como toda buena receta vintage requiere de tiempo y por tanto de paciencia.

Este tomate frito está hecho a base de tomates, sin ningún tipo de aditivo y/o conservante, que han perdido todo el agua durante el proceso de cocción junto al aceite. Sin lugar a duda, más rico estará cuanto mayor calidad de los tomates y del aceite tengamos al alcance de nuestra mano. Veréis lo sencillo que es y el resultado que da.

Como referencia he tenido en cuenta el buen hacer de los mayores y, también hay que decirlo, el fantástico e imprescindible Lazy Blog de Paco.




Sin más dilación vamos con la receta.

Ingredientes

- Tomates
- Aceite de oliva virgen
- Sal y azúcar

Para esta receta, yo he utilizado 1,8kg. de tomates y he obtenido unos 800grs. de tomate frito. En cuanto a la sal y el azúcar, la mitad de la primera respecto de la segunda (2 cucharadas de sal y 4 de azúcar). Por último, he utilizado entre 100 y 125ml. aceite.

Elaboración

Como siempre, lo primero que vamos a hacer es lavar los tomates.

Existen varias formas de prepararlos previamente a la cocción pero hoy solamente vamos a lavarlos, quitamos con un cuchillo la parte más dura donde se unen con la mata o rama y los troceamos en cuartos. No os preocupéis por las pieles porque en el último paso nos libraremos de ellas al utilizar el chino o pasapurés.




En una cacerola adecuada, añadimos el aceite de oliva y calentamos. Sin dejar que éste coja mucha temperatura añadiremos los tomates y removemos bien.

Incorporamos la sal y el azúcar y subimos el fuego hasta que comience a hervir. Removemos, tapamos y dejamos a fuego lento unas 2 horas.




Lo ocurrirá a partir de ahora es que los tomates irán soltando el agua que contienen con todos sus nutrientes, ayudando nosotros con una cuchara de madera, y mediante la cocción junto al aceite conseguiremos una salsa de tomate concentrado o puré de tomate.




Vigilad, removed desde el fondo y probad la salsa durante todo este tiempo por si tuvieseis que hacer alguna modificación sobre la marcha.

De esta forma obtendremos una salsa de tomate frito casero perfecta para acompañar los platos que más os gusten y de fácil preparación.




En último lugar, con ayuda de un pasapurés, pasamos el tomate frito para obtener nuestra salsa definitiva limpia de pieles y con una fineza excelente.




Hoy en día ya existen marcas que comercializan salsas de tomate frito realmente buenas, pero ¿estamos dispuestos a pagar su precio cuando obtenemos tal resultado en nuestros fogones?

Sólo os digo una cosa: merece la pena hacerlo al menos una vez para poder valorarlo.




¿Todavía os lo estáis pensando?

3 comentarios:

  1. A mi es una salsa que me encanta.......pero la casera. Aun no he encontrado ninguna comercial que se le acerque....por eso cuando es la temporada de tomate aquí en Asturias aprovecho para hacer conservas que me duren todo el año.
    Buen finde

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Estoy contigo Belén, lo casero supera las marcas... Que suerte tienes de poder almacenar tomate frito para todo el año! Gracias y buen fin de semana.

      Eliminar

19 de abril de 2013

TOMATE FRITO CASERO. TOMATE Y NADA MÁS.

Hoy preparamos esta salsa de tomate frito casero, sin más pretensión que la de mostrar lo fácil que resulta preparar una de las salsas más conocidas en todo el mundo. Ni que decir tiene que ha servido y sigue sirviendo como condimento indispensable para multitud de recetas de cualquier gastronomía.

Hoy me voy a centrar en una salsa de tomate básica elaborada como antaño, y como toda buena receta vintage requiere de tiempo y por tanto de paciencia.

Este tomate frito está hecho a base de tomates, sin ningún tipo de aditivo y/o conservante, que han perdido todo el agua durante el proceso de cocción junto al aceite. Sin lugar a duda, más rico estará cuanto mayor calidad de los tomates y del aceite tengamos al alcance de nuestra mano. Veréis lo sencillo que es y el resultado que da.

Como referencia he tenido en cuenta el buen hacer de los mayores y, también hay que decirlo, el fantástico e imprescindible Lazy Blog de Paco.




Sin más dilación vamos con la receta.

Ingredientes

- Tomates
- Aceite de oliva virgen
- Sal y azúcar

Para esta receta, yo he utilizado 1,8kg. de tomates y he obtenido unos 800grs. de tomate frito. En cuanto a la sal y el azúcar, la mitad de la primera respecto de la segunda (2 cucharadas de sal y 4 de azúcar). Por último, he utilizado entre 100 y 125ml. aceite.

Elaboración

Como siempre, lo primero que vamos a hacer es lavar los tomates.

Existen varias formas de prepararlos previamente a la cocción pero hoy solamente vamos a lavarlos, quitamos con un cuchillo la parte más dura donde se unen con la mata o rama y los troceamos en cuartos. No os preocupéis por las pieles porque en el último paso nos libraremos de ellas al utilizar el chino o pasapurés.




En una cacerola adecuada, añadimos el aceite de oliva y calentamos. Sin dejar que éste coja mucha temperatura añadiremos los tomates y removemos bien.

Incorporamos la sal y el azúcar y subimos el fuego hasta que comience a hervir. Removemos, tapamos y dejamos a fuego lento unas 2 horas.




Lo ocurrirá a partir de ahora es que los tomates irán soltando el agua que contienen con todos sus nutrientes, ayudando nosotros con una cuchara de madera, y mediante la cocción junto al aceite conseguiremos una salsa de tomate concentrado o puré de tomate.




Vigilad, removed desde el fondo y probad la salsa durante todo este tiempo por si tuvieseis que hacer alguna modificación sobre la marcha.

De esta forma obtendremos una salsa de tomate frito casero perfecta para acompañar los platos que más os gusten y de fácil preparación.




En último lugar, con ayuda de un pasapurés, pasamos el tomate frito para obtener nuestra salsa definitiva limpia de pieles y con una fineza excelente.




Hoy en día ya existen marcas que comercializan salsas de tomate frito realmente buenas, pero ¿estamos dispuestos a pagar su precio cuando obtenemos tal resultado en nuestros fogones?

Sólo os digo una cosa: merece la pena hacerlo al menos una vez para poder valorarlo.




¿Todavía os lo estáis pensando?

3 comentarios:

  1. A mi es una salsa que me encanta.......pero la casera. Aun no he encontrado ninguna comercial que se le acerque....por eso cuando es la temporada de tomate aquí en Asturias aprovecho para hacer conservas que me duren todo el año.
    Buen finde

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Estoy contigo Belén, lo casero supera las marcas... Que suerte tienes de poder almacenar tomate frito para todo el año! Gracias y buen fin de semana.

      Eliminar