GALLETAS DE LIMÓN Y CANELA

Ya estoy de vuelta con una receta bastante sencilla y que os sacará de algún apuro cuando alguien se os presente en casa de repente a la hora de la merienda.

Estas galletitas las vamos a poder hacer con la masa sobrante de la pasta brisa que preparamos el otro día, cuando hicimos la Tarta de Limón y Almendras. Con algún ingrediente más y un corta pastas vamos a hacer unas galletas muy finas con las que sorprenderéis a cualquiera que se atreva a sentarse a tomar un café con vosotros.

Digamos que se trata de una receta de aprovechamiento y de continuidad de otra que ya preparamos y que nos va a dar mucho juego.

Ingredientes

- Pasta brisa sobrante

- Azúcar

- Almíbar de limón

- Almendras crudas

- Canela molida

Elaboración

1- Vamos a extender la masa con un rodillo hasta alcanzar un grosor de unos 5mm.

2- Damos la forma que más nos guste a nuestras galletas con ayuda de un corta pastas y las situamos sobre una hoja de papel sulfurizado en la bandeja del horno.

3- Damos un pequeño baño de almíbar de limón, colocamos una almendra, una pizca de azúcar y canela molida al gusto.

Repetimos este proceso con cada una de las galletas hasta acabar.

También podéis batir un huevo y pincelar las galletas antes de hornear para crear una película brillante y darle un aspecto de pasta de té.

La idea de utilizar el almíbar me pareció muy buena y además conseguimos que la almendra quede fijada en la masa.

4- Introducimos en el horno precalentado a 190ºC y esperamos hasta que se doren, unos 10-12 minutos.

¿Más fácil imposible, no?

Y además con una presencia que asusta...

5- Dejamos enfriar sobre una rejilla.

Sin duda, esta es una de las maneras más fáciles de aprovechar los restos de otra receta, sin complicaciones y con poco esfuerzo.

Si os gusta la textura y sabor de este tipo de masa, estas son vuestras galletas.